Si escribiésemos uno de esos libros o artículos donde se enumeran de forma agolpada razones, vivencias, lugares y cosas similares que debemos hacer antes de morir seguramente lo haríamos de flamenco. No puede ser de otra forma. Y uno de los puntos sería, sin temor a equivocarnos, vivir un ambiente flamenco en una peña. Sí, que ni son lo que fueron y es más que posible que tampoco lo serán, pero las peñas flamencas son las guardianas de lo jondo y a ellas debemos rendir en alguna ocasión su mijita de pleitesía. Por eso hemos pensado hablar de ellas a lo largo de este artículo. Contarte sus orígenes, curiosidades y alguna que otra cosita sobre su importancia.
Empecemos por el principio. ¿Qué son las peñas flamencas? Son asociaciones que sirven para que aficionados y artistas del mundo flamenco se reúnan alrededor de la tradición popular. Nutren a los interesados en actuaciones y son una fuente de promoción de artistas. Digamos que no son reuniones informales como las que se puede dar en la barra de un bar o en cualquier reunión familiar, pero tampoco formales como en teatros o tablaos.
Aunque se pueden encontrar por toda España e incluso en algunos países del extranjero, las peñas son tradicionalmente andaluzas. En España hay más de quinientas peñas y unas cuatrocientas tienen su ubicación en Andalucía. Se suelen agrupar por federaciones de provincias.
Sigamos con el origen, un tema que suele generar cierta controversia por la dificultad de fecharlo o ubicarlo en un punto exacto. Lo cierto es que los aficionados y profesionales al cante tuvieron la necesidad de buscar sitios para reunirse a disfrutar del arte jondo. Escucharse unos y otros, hacer tertulias o simplemente aprender nuevos estilos.
Allá por el año 1880 se sabe que se hacían este tipo de reuniones en el Café de Silverio Franconetti en Sevilla entre un grupo de amigos. Algo que probablemente ocurriría en otros puntos de Andalucía. En 1949 empiezan a aparecer los primeros grupos de aficionados que fundan peñas flamencas. Por ejemplo, en Granada nace la célebre Peña La Platería y en Los Palacios, Sevilla, la Peña Tertulia Flamenca El Pozo de las Penas.
«Desde Artes Escénicas Rebollar no podemos hacer otra cosa que aplaudir a rabiar a las peñas flamencas como garantes del flamenco jondo. Es de bien nacidos ser agradecidos, y tenemos que agradecer el fomento que hacen del flamenco, así como la promoción del talento que llevan a cabo con jóvenes del mundo del arte jondo»
Por aquel entonces las peñas dependían de los gobiernos civiles, porque cabe recordar que la ley prohibía reuniones públicas de más de tres personas. En 1964 nace la Ley de Asociaciones, y esto posibilita que se generalice la fundación de peñas flamencas.
Digamos que son varios los motivos que hacen que en esos mediados del siglo XX surjan las peñas. Nos centraremos en dos. Por un lado, lo dicho con anterioridad, disponer de un espacio fijo para reunirse de forma periódica alrededor del flamenco. Por otro, quizá con mayor importancia, la corriente conservadora de los estilos más clásicos y ortodoxos. Una corriente que impulsa el libro de Antonio Mairena titulado Mundo y Formas del Cante Flamenco, precursor de lo que se ha denominado el Mairenismo y que defiende por encima de todo el cante jondo gitano.
Con el paso del tiempo las peñas han seguido su rumbo. Muchas han perdido fuerza y es incluso raro escuchar el rasgueo de una guitarra o un zapateado. Otras se han ido a la parte más comercial, restaurantes con algo de flamenco en el menú. Sin embargo, aún quedan bastantes donde lo jondo es el epicentro de todo.
Uno de los lugares donde las peñas flamencas son un espacio de culto es Jerez de la Frontera. En un artículo publicado por Estela Zatania en el portal Expoflamenco se recogen algunas declaraciones de interés sobre las peñas.
«Si no has ido a una peña flamenca, ve. Empápate de su ambiente. Luego pásate por Artes Escénicas Rebollar, un espacio donde se vive el flamenco como en ningún otro sitio en Sevilla»
«Desde las Peñas como tejido asociativo cultural actuamos como garantes del flamenco desde la base, identificando y promoviendo a los nuevos valores y al flamenco en general como seña de identidad. Actualmente la Federación de Jerez está compuesta por doce entidades. Solo Jerez representa más del 25 por ciento de todas las peñas de la provincia de Cádiz», explica Juan Alfonso Romero, presidente del Don Antonio Chacón Centro Cultural Flamenco y vicepresidente de la Federación de Peñas Flamencas de Jerez.
«La importancia de las peñas es que son el futuro, recuerdos de la infancia, de ver protegido el cante y nuestras costumbres. A través del tiempo las cosas nos han dado la razón. Las peñas han sido uno de los pilares importantes del flamenco. Con la Peña Tío José de Paula tuve la suerte de ser fundador. A la feria en aquella época llevamos al Chocolate, Terremoto, Agujetas, Tío Sordera o Tío Borrico a escucharlos cantar. Es lo que nos gustaba, esa es la misión de los peñistas, pa’ darle categoría al flamenco. Pa’ mí el sentido de las peñas es ese, había fuente por detrás muy buena, y tienen futuro», recuerda Joaquín Fernández Soto Zambo, presidente de la Peña Flamenca Tío José de Paula.
«Nos basamos en la grandeza y en la pureza del Flamenco, y es nuestro deber apoyar a la nueva cantera que tiene la herencia flamenca, y se va adaptando a los nuevos tiempos, ya que precisamente el flamenco es eso, tiempo en el tiempo, una forma de vida. Las peñas flamencas tienen el deber de promocionar, favorecer el acceso al mismo y transmitir al mundo», confiesa Antonio Benítez Manosalbas, uno los fundadores de la Peña Flamenca Los Cernícalos.
Desde Artes Escénicas Rebollar no podemos hacer otra cosa que aplaudir a rabiar a las peñas flamencas como garantes del flamenco jondo. Es de bien nacidos ser agradecidos, y tenemos que agradecer el fomento que hacen del flamenco, así como la promoción del talento que llevan a cabo con jóvenes del mundo del arte jondo. Si no has ido a una peña, ve. Empápate de su ambiente. Luego pásate por Artes Escénicas Rebollar, un espacio donde se vive el flamenco como en ningún otro sitio en Sevilla.